Intervención social con familias inmigrantes
La emigración (salida del país) y la inmigración (entrada al país) son propias de una crisis familiar en el sentido de oportunidad y peligro. La emigración e inmigración suponen una perturbación para el sistema familiar. Esto conlleva un proceso psicológico de aculturación. Por un lado, puede existir estrés por la aculturación (pérdida y transformación) y, por otro, un duelo migratorio.
Grados de integración
- Asimilación: si su identidad cultural se desintegra.
- Segregación: rechazan la interacción y se forman guetos.
- Marginación: pierden la cultura de origen pero no se integran en la nueva.
- Integración bicultural: conservan la identidad cultural y, además, interactúan con la nueva cultura.
Cuando intervenimos con familias migrantes debemos tener en cuenta:
- La explicación que ellos dan sobre el problema. El significado es diferente en función de la cultura.
- Valorar los motivos de la migración.
- Cultura de origen y grado de similitud con la cultura de acogida.
- Si estaban preparados para emigrar o fue una decisión rápida.
- El momento del ciclo vital de la familia (hijos adolescentes, etc).
- El tipo de familia inmigrante ya que su abordaje varía: si es una familia afectada por la inmigración o una familia con mediana o buena posición social, profesional y legal.
- Debemos respetar las reglas culturales e introducir flexibilidad.
- El trabajo en red.