¿Qué es el duelo?
El duelo es el proceso por el que una persona que ha perdido (una persona que ha muerto o de la que se ha separado, pero también otro tipo de objetos de vinculación como la casa, un trabajo, salud, empleo…) algo importante para ella, se adapta y se dispone a vivir sin ello.
Manifestaciones corrientes del duelo
- Sentimientos: tristeza, rabia, irritabilidad, culpa, ansiedad, cansancio, etc.
- Sensaciones: molestias gastricas, dificultad para tragar, hipersensibilidad al ruido…
- Cogniciones. incredulidad, confusión, dificultades de memoria y concentración, etc.
- Alteraciones perceptivas: ilusiones, alucinaciones, fenómenos de presencia…
- Conductas: hiperfagia o anorexia, alteraciones del sueño, distracciones, abandono de relaciones sociales…
El duelo es el proceso por el que quien lo realiza es capaz de reconstruir su mundo sin el objeto perdido. Se trata de dotar de un nuevo sentido a los elementos con los que el sujeto debe construir su realidad. Este proceso integra cuatro elementos que se corresponden con las tareas enunciadas por Worden:
- Construir un mundo sin la persona o el objeto perdido.
- Dar sentido a los sentimientos asociados a la pérdida e integrarlos en la propia biografía.
- Encontrar la forma de resolver prácticamente aquellas tareas para cuya ejecucción nos valíamos de la persona o del objeto perdido.
- Ser capaces de experimentar afectos semejantes a los que anteriormente se orientaban al objeto perdido, hacia otros objetos, personas o relaciones, lo que, precisamente, supone la construcción de un nuevo mundo.
Los/as Trabajadores/as Sociales debemos tener presente el proceso de duelo en nuestro trabajo y saber dotar de herramientras a nuestros usuarios/as para que puedan superar la pérdida sin que se convierta en un trastorno de duelo complicado.